... vestido, fresco como un novio, la barba muy afeitada y rasa como un campo después de la siega. Estaba perfumado como un mercader de modas y entre el índice y el pulgar tenía un bote de perfumes ...
... verdaderamente me han dado la vida, no sólo a mí, sino a otros muchos. Porque, cuando es tiempo de la siega, se recogen aquí, las fiestas, muchos segadores, y siempre hay algunos que saben leer ...
... ahora se veía claramente, al quedar despojados los campos de las cortinas de mies que la ocultaban antes de la siega.Sentía el herido a un mismo tiempo el impulso de la curiosidad y el miedo a ver ...
... . ¿Qué dices tú a eso, Isak?—Casarnos, claro.—¿No podrías subir, Oline, después de la siega del heno, para cuidar del ganado mientras nosotros hacemos el viaje? –pregunta Inger.Y dice ...
... para pensar bien es atender. La segur no corta si no es aplicada al árbol; la hoz no siega si no es aplicada al tallo. Algunas veces se le ofrecen los objetos al espíritu sin que atienda; como sucede ...
... . Pues que avanza octubre y se coge el maíz; y déme usted las deshojas, y tómate la siega del retoño, y el derrotar las mieses... ¡como si lo tuviera delante, don Baldomero; lo mismo que si lo tocara ...
... las criaturas, que crees siempre que la tierra se mueve, que el sol brilla y que la muerte siega solamente para ti. Hormiga maldiciendo a Dios desde el tallo de una hierbecilla. Y los que han perdido ...
... . Ni un alma detrás. Era el cadáver de aquel hidrópico infeliz, cuya mujer murió de parto, por la siega. Cuando partían de otra casa, les alcanzó la vieja, que iba ya pregonando los peces-«& 160 ...
... 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;hechas también de barro, pobre corral donde la hoz no siega, sólo una cruz, en el desierto campo & 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;& 160;señala ...
... aunque dijo al otro que lo había hecho. Tocaban a su término las faenas que a aquel campo les llevaron. La siega estaba hecha, no sin trabajo porque el sol abrasaba. A la hora de la siesta se echaba ...
... de hombres ca& 237;dos; vio caballos que corr& 237;an pis& 225;ndose las tripas. La siega de la muerte no hab& 237;a sido por gavillas: todo un campo quedaba liso con s& 243;lo un golpe de hoz ...
... hace, y de toda suerte de gentes, edades y preeminencias hinche sus alforjas. No es segador que duerme las siestas, que á todas horas siega y corta asi la seca como la verde yerba, y no parece que
... después de las vísperas, cuando hace buen tiempo, vamos hasta el puente o a ver los henos en tiempo de la siega, contestó la señora Grandet. -Y ¿no hay aquí teatro?-¡Ir al teatro a ver comediantes ...
... EvaLos cuatro hijos de Evade Vicente Blasco Ibáñez Capítulo IIba á terminar la siega en la gran estancia argentina llamada «La Nacional». Los hombres venidos de todas partes para recoger la cosecha ...
... t& 237;o sale ma& 241;ana para La Guardia y Samaniego con objeto de ver los trigos y preparar la siega de las cebadas... Dicen que la cosecha ser& 225; tremenda... Pues mi t& 237;o no va a La Guardia ...
... LLEGO LA 138ª NOCHEElla dijo:...y fué como si nunca hubiese sido. ¡Porque el tiempo lo siega todo y nada recuerda ¡Y aquel que quiera saber el destino de su nombre en lo futuro, aprenda a mirar ...
... tratar de impedir que salga la noticia en los diarios, pero si esta situación se prolonga, estoy reventado para toda la siega...Salimos juntos.-Es fácil. Voy a buscar el dinero.-¿Te veré esta noche ...
... , edades y preeminencias hinche sus alforjas. No es segador que duerme las siestas, que á todas horas siega y corta asi la seca como la verde yerba, y no parece que masca, sino que engulle y traga ...
Mes de agosto, del Ciclo de los meses. Fresco s. XV. La siega. Castillo del Buonconsiglio, Trento, Italia.La base de la supervivencia humana reside en la magistral capacidad del hombre para manipular ...
... de tierra adentro que volvían a sus casas después de ganar los grandes jornales de la siega preguntaban quién era la tal Sancha que las mujeres nombraban con cierto terror, y los del lago contaban ...
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