Conversaciones mantenidas el 28-IV-1463 por Enrique IV de Castilla y Luis XI de Francia –quien actuó como mediador– que pusieron fin a las disputas entre el monarca castellano y el rey Juan II de Aragón y Navarra. La negociación incluía como puntos esenciales las antiguas posesiones del monarca aragonés en Castilla, la guerra de Navarra y la designación de Enrique VI como conde de Barcelona. Con anterioridad el monarca castellano y Juana Enríquez, apoderada del aragonés, prometieron someterse a la decisión de Luis XI (IV-1463). La entrevista, que fue precedida por las llamadas “vistas de Fuenterrabía”, tuvo lugar entre Hendaya (Francia) y Fuenterrabía (Guipúzcoa), a orillas del Bidasoa, y dio como resultado una sentencia arbitral de Luis XI en la que ponía fin a las aspiraciones de Enrique en Cataluña. En compensación por los gastos sufridos en la guerra de Navarra éste recibiría la merindad de Estella (Navarra). Juan II, por su parte, debía renunciar a las...