La fontana de oro : 15
La fontana de oro Capítulo XIV La determinación de Benito Pérez Galdós «¿Qué busca usted?, ¿quién es usted?, ¿qué hace usted aquí?». -¿No me conoce usted? Soy el que hace unos días le trajo a usted muy mal parado a su casa, y venía a ver si estaba usted ya completamente restablecido. -Sí, señor: estoy bueno -contestó bruscamente; y entrando en la sala, a donde le siguió el joven-: ¿no se ofrece nada más? -Nada más, y me retiro: acabo de llegar -dijo con afectada naturalidad el militar-. Me retiro repitiéndole que me intereso mucho por su salud. -Bien: ya me lo dijo usted el otro día -respondió Coletilla dirigiendo miradas recelosas a Clara y a Pascuala. -¿Y no me manda usted nada? -Nada más sino que me deje usted en paz. ¿No va usted a la procesión? Está muy lucida. -No estoy para procesiones. -¿Le gusta a usted saber lo que pasa en las casas de los realistas? -añadió el anciano con el acento amargo y receloso propio de su carácter-....
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