El retrato de Dorian Gray : 9

El retrato de Dorian GrayCapítulo 9 de Oscar Wilde Cuando estaba desayunando a la mañana siguiente, el criado hizo entrar a Basil Hallward. -Me alegro de haberte encontrado, Dorian -dijo el pintor con entonación solemne-. Vine a verte anoche, y me dijeron que estabas en la ópera. Comprendí que no era posible. Pero siento que no dijeras adónde ibas en realidad. Pasé una velada horrible, temiendo a medias que a una primera tragedia pudiera seguirle otra. Creo que deberías haberme telegrafiado cuando te enteraste de lo sucedido. Lo leí casi por casualidad en la última edición del Globe, que encontré en el club. Vine aquí de inmediato, y sentí mucho no verte. No sé cómo explicarte cuánto lamento lo sucedido. Me hago cargo de lo mucho que sufres. Pero, ¿dónde estabas? ¿Fuiste a ver a la madre de esa muchacha? Por un momento pensé en seguirte hasta allí. Daban la dirección en el periódico. Un lugar en Euston Road, ¿no es eso? Pero tuve miedo de avivar un dolor...

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