El hampón: 7
El hampón Capítulo VII de Joaquín Dicenta Desde aquella noche, y por caminos de curiosidad, fue a la Cañas el enamoramiento. ¿Quién era aquel hombre? ¿Por qué llegó a la mina? ¿Por qué ocultaba en el más profundo misterio su existencia anterior? ¿A qué vivía al presente lejos de todo trato, haciendo alcoba de una galería abandonada? ¿Por qué la primera noche la dijo y le demostró después con su conducta que las mujeres sólo eran para él un remate del vino; que nunca, nunca, pondría en la posesión de una hembra el interés de su alma? Lo último tenía que verse. Se le metió a la Cañas en el caletre ser algo más que el remate del vino para el desdelloso minero, y, o poco valía, o salía avante con la suya. ¡Faltaba que a ella, a ella, por quien se pirraban los parroquianos de La Buena Sombra y todos los galanes que con ella entraban en diálogo una vez, la tomara y dejara a su gusto un haraposo, con más pelos que una zalea y más churretes de...
Está viendo el 16% del contenido de este artículo.
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales: Enseñanza Bibliotecas públicas