Doña Luz: 22
Conclusión 22 Pág. 22 de 22 Doña Luz Juan Valera Habían pasado cuatro meses desde que ocurrió el ya referido ataque. En este tiempo habían sucedido cosas singularísimas, que nadie acertaba a explicar en Villafría. Al día siguiente del ataque había llegado D. Jaime, a quien llamaremos el Marqués, pues ya lo era. El Marqués aceptó y recogió la magnífica herencia de doña Luz. Don Gregorio se volvió a Madrid en seguida. Todo esto era naturalísimo. Lo que no lo era, porque venía a contrariar planes anteriores, conocidos ya de todos, era que el Marqués, en vez de llevarse a doña Luz a la corte, se volvió solo a los cuatro días de estar en el lugar, y se dejó en él a doña Luz, bastante delicada e indispuesta. Los que vieron partir al Marqués aseguraban que llevaba el rostro muy fosco, y que parecía estar de un humor de todos los diablos. Doña Luz, desde la partida del Marqués, había estado encerrada siempre. Ni para ir a misa salía a la...
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